Las plantas venenosas pueden causar pérdidas graves, sobre todo en determinados lugares o en determinadas temporadas,
como a comienzos de la primavera, cuando todavía no hay plantas de forraje disponibles. Algunas plantas sólo son venenosas
en ciertas épocas, por ejemplo, el sorgo sudanés, que sólo es venenoso cuando está marchito o congelado. Otras plantas, como
la dragontea (véase Aráceas), son siempre venenosas.
Los pesticidas, insecticidas, herbicidas, fungicidas y otras sustancias empleadas en el control de plagas y
el control de malas hierbas producen enfermedades y la muerte si no se usan de forma apropiada. No obstante se culpa a los
pesticidas de ser la causa de muertes de animales que en realidad se deben a enfermedades víricas o bacterianas no detectadas.
El uso excesivo o indebido de algunos fármacos causa la muerte a muchos animales. También los antibióticos de
amplio espectro son letales en el alimento de los cobayas y un exceso de sal puede matar a los cerdos y los pollos.
El agua es esencial para la mayoría de las funciones corporales. La sobrealimentación, en especial cuando se
trata de alimentos poco frecuentes en la dieta convencional, produce trastornos digestivos. Un animal sufrirá inanición si
no dispone de alimento o si es dominado socialmente por otros animales.
Los requerimientos nutritivos y la complejidad de los animales, a pesar de muchos años de intensas investigaciones,
siguen siendo poco conocidos. Cada especie, al igual que cada raza o variedad dentro de una especie, tiene diferentes necesidades.
Un cachorro de dogo alemán o Gran danés, por ejemplo, sufriría raquitismo si fuera alimentado con una dieta propia de un cachorro
de terrier. Las crías de faisanes y pavos requieren muchas más proteínas que los pollos. Ciertos piensos, o alimentos para
animales, pueden predisponerlos a determinadas enfermedades. Por ejemplo, los colibríes desarrollan candidiasis cuando se
les alimenta con miel, pero no cuando se les alimenta con jarabe de sacarosa. Los alimentos pueden contener también antivitaminas,
que producen enfermedades por carencia de éstas.
8. CONTROL DE
LAS ENFERMEDADES En el pasado, los programas gubernamentales han
llegado a erradicar enfermedades devastadoras como la durina y la melioidosis equina, así como la pleuroneumonía y la glosopeda
vacuna, y han conseguido controlar enfermedades como la brucelosis y el cólera porcino. Las medidas de control que se practican
en los programas actuales implican la cuarentena de los animales importados, la cooperación entre organismos para el control
y estudio de las enfermedades de los animales, la inspección de las carnes rojas y de ave para minimizar el contagio de enfermedades
de los animales al ser humano, y la inspección y evaluación de vacunas y otros productos farmacéuticos y biológicos en lo
referente a su pureza, eficacia y seguridad. Las universidades y otros centros de investigación realizan estudios sobre las
múltiples enfermedades que afectan a todo tipo de animales.
|